Thor es un dios de la mitología nórdica, conocido como el dios del trueno y el protector de los humanos. Es hijo de Odín, el dios principal de la mitología nórdica, y de Jörð, la diosa de la tierra. Thor es conocido por su gran fuerza física y por su martillo mágico, Mjölnir, con el cual puede controlar los rayos y el trueno. Además, también es conocido por su valentía y su determinación para proteger a los humanos de los gigantes y otros seres malignos.
En las historias mitológicas, Thor es retratado como un héroe valiente y protector, que lucha constantemente contra los enemigos de los dioses y los humanos. A menudo se le ve viajando a través del mundo en su carro tirado por caballos, buscando aventuras y luchando contra monstruos gigantes.
En la iconografía, Thor se representa como un hombre fuerte y musculoso, con un gran bigote y una larga barba. A menudo se le ve luciendo un yelmo con cuernos, y sujeta su martillo mágico, Mjölnir. También se le representa con un par de guanteletes mágicos, los cuales le permiten sujetar el martillo con mayor fuerza.
En la religión pagana, Thor era uno de los dioses más populares y venerados entre la gente común, especialmente entre los campesinos y los pescadores. Era considerado como el protector de los humanos y se le pedía ayuda para protegerse de los rayos y los truenos.
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